Este sábado por la tarde, día 19, volvimos a ir al carrizal de Tordera. Uno de nuestros objetivos, era ver como había influido esta ola de frio en la población de aves que utilizan el carrizal como dormidero. Nuestra primera hipótesis enseguida quedó descartada. Pensábamos que habría aumentado el número de schoeniclus y tal vez el de otras especies de fringílidos, pero Xavi nos anticipó, que en sus observaciones previas, habia visto un importante descenso de estas especies en la zona. La realidad quedó confirmada por el número y tipo de especies capturadas. Sorprende por una parte, casi la desaparición de fringílidos, verderones y principalmente la disminución considerable de schoeniclus, y por otra parte, el gran aumento de estrildas (pese a una las temperaturas muy bajas ) y moderado aumento de buitrones.
Los resultados totales de esta fría jornada han sido los Siguientes:
22 Escribanos palustres (Emberiza schoeniclus)
1 Herrerillo común (Parus caeruleus)
7 Buitrones (juncidis Buitrón)
7 Mitos (Aegithalos caudatus)
1 Mirlo común (Turdus merula)
1 Bisbita común (Anthus pratensis)
1 Chochín (Troglodytes troglodytes)
1 Ruiseñor bastardo (Cettia cetti)
25 de los Picos de coral (Estrilda Astrid)
Como curiosidad, observamos varios bandos de avefrías en los campos colindantes. Hemos realizado esta jornada Angel Fernández, Xavi Romera e Ignasi Toranzo. Las condiciones climatológicas han sido duras, llegando a tener una temperatura de menos tres grados centígrados y un alto porcentaje de humedad atmosférica, factores que influyeron para que rápidamente se formaran critales de hielo y escarcha sobre la vegetación y las redes, dificultando las tareas de recoger las redes y el material. No siempre se trabaja en condiciones conforables.
Ignasi Toranzo
A todo esto que comenta mi amigo Ignasi, debo añadir que yo también debía haber ido a esta jornada, pero por problemas de última hora (la dichosa espalda ...), no pude ir. Otra vez será ...
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